Cómo usar correctamente las planchas de pelo

¿Qué son las planchas de pelo y cómo funcionan?

Las planchas de pelo son herramientas de estilismo utilizadas para alisar, rizar u ondular el cabello mediante la aplicación de calor. Están compuestas por dos placas que, al calentarse, permiten moldear el cabello según el objetivo deseado. Estas placas pueden estar fabricadas con diferentes materiales como cerámica, turmalina o titanio, que ayudan a distribuir el calor de manera uniforme y reducir el daño al cabello.

Funcionamiento de las planchas de pelo

Las planchas de pelo funcionan mediante la generación de calor, el cual es regulado a través de un termostato integrado en el dispositivo. Este calor transforma la estructura del cabello al romper los enlaces de hidrógeno que mantienen su forma natural, permitiendo moldearlo a la forma deseada. Algunas planchas cuentan con ajustes de temperatura que permiten personalizar el nivel de calor según el tipo de cabello, minimizando el riesgo de daño.

• Placas de cerámica: Proporcionan un calor uniforme y son menos propensas a sobrecalentar, lo que ayuda a proteger el cabello.
• Placas de turmalina: Emiten iones negativos que reducen el frizz y potencian el brillo del cabello.
• Placas de titanio: Se calientan rápidamente y mantienen una temperatura constante, adecuadas para cabello grueso y rizado.

El uso correcto de las planchas de pelo incluye la aplicación de productos protectores térmicos antes del estilizado, para minimizar el impacto del calor en la cutícula del cabello. Además, es recomendable no utilizar las planchas de pelo todos los días para evitar el daño y mantener el cabello saludable.

Beneficios de usar correctamente las planchas de pelo

El uso correcto de las planchas de pelo puede aportar numerosos beneficios a tu rutina de cuidado capilar. Uno de los mayores beneficios es la capacidad de lograr un alisado profesional desde la comodidad de tu hogar, ahorrando tiempo y dinero en visitas al salón de belleza.

Reducción del Frizz

Cuando se utilizan adecuadamente, las planchas de pelo pueden ayudar a sellar la cutícula del cabello, lo que reduce el frizz y aporta un acabado más suave y pulido. Esto es especialmente útil para quienes tienen el cabello rizado o con tendencia al encrespamiento.

Versatilidad en Peinados

Además de alisar, las planchas de pelo pueden ser usadas para crear ondas y rizos, permitiendo una mayor versatilidad en tus estilos de peinado. Con la técnica correcta, puedes transformar tu look de liso a rizado en cuestión de minutos, ofreciendo múltiples opciones sin necesidad de múltiples herramientas.

Durabilidad de los Resultados

Cuando se utilizan con los productos protectores y técnicas adecuadas, los resultados obtenidos con las planchas de pelo pueden durar varios días. Esto significa que tu peinado se mantendrá impecable, con menos necesidad de retoques diarios, lo que también puede contribuir a reducir el daño por calor frecuente.

Preparación del cabello antes de usar planchas de pelo

Antes de emplear planchas de pelo, es fundamental asegurarse de que el cabello esté completamente limpio y seco. La presencia de residuos de productos, aceites naturales o humedad puede causar daño significativo cuando se expose al calor intenso de las planchas. Lavarse con un champú y acondicionador adecuados para el tipo de cabello ayuda a eliminar cualquier acumulación y prepara el cabello para el tratamiento térmico.

Aplicación de protectores térmicos

Un paso crucial en la preparación del cabello es la aplicación de un protector térmico. Este producto actúa como una barrera entre el cabello y el calor intenso, reduciendo así el riesgo de daño y quiebre. Se recomienda distribuir el protector térmico uniformemente, asegurándose de que cada mechón esté cubierto antes de proceder con el uso de las planchas.

Desenredar y secar completamente

Desenredar el cabello antes de usar las planchas es esencial para evitar tirones y roturas. Un peine de dientes anchos o un cepillo desenredante son herramientas ideales para esta tarea. Además, es crucial que el cabello esté completamente seco, ya que el uso de planchas en cabello húmedo puede provocar quemaduras y dañar la estructura del cabello. Utilizar un secador con ajuste de frío puede ayudar a eliminar cualquier resto de humedad sin añadir más calor.

Separación en secciones

Para obtener resultados óptimos y proteger el cabello de la exposición excesiva al calor, separar el cabello en secciones es una técnica muy útil. Pequeñas secciones permiten un alisado más preciso y uniforme, asegurando que cada parte del cabello reciba una cantidad controlada de calor. Esto no solo mejora el acabado del peinado, sino que también minimiza el riesgo de daño térmico.

Pasos para usar las planchas de pelo de manera correcta

1. Preparar el cabello

Antes de utilizar las planchas de pelo, es fundamental lavar y secar el cabello completamente. Aplicar un protector térmico es crucial para evitar daños por el calor y mantener el cabello saludable. Peina tu cabello para desenredarlo y asegurarte de que esté libre de nudos.

2. Ajustar la temperatura

Elige una temperatura adecuada según tu tipo de cabello. Para cabellos finos y frágiles, se recomienda una temperatura baja, entre 150°C y 180°C. Los cabellos gruesos o rizados pueden necesitar temperaturas más altas, entre 200°C y 220°C. Es esencial evitar temperaturas excesivas para prevenir el daño del cabello.

3. Secciona el cabello

Divide tu cabello en secciones pequeñas y manejables. Esto facilita el alisado y asegura que cada hebra de cabello reciba una cantidad uniforme de calor. Usa pinzas para sujetar las secciones superiores mientras trabajas con las inferiores.

4. Deslizar la plancha

• Comienza por la raíz y desliza la plancha hacia las puntas en un movimiento constante y suave.
• No mantengas la plancha en la misma área por mucho tiempo para evitar quemaduras.
• Repite el proceso con cada sección hasta que todo el cabello esté liso.

Errores comunes al usar las planchas de pelo

Uno de los errores más frecuentes al usar las planchas de pelo es aplicar calor excesivo. Es crucial ajustar la temperatura según el tipo de cabello para evitar daños. Los cabellos delgados o dañados requieren temperaturas más bajas, mientras que los cabellos gruesos pueden necesitar un poco más de calor.

Otra equivocación habitual es no proteger el cabello adecuadamente. Usar un protector térmico antes de aplicar la plancha es fundamental para reducir el daño por calor y mantener la salud del cabello. Este paso a menudo se pasa por alto, pero es esencial para evitar la sequedad y las puntas abiertas.

Además, muchas personas no se aseguran de que su cabello esté completamente seco antes de usar la plancha. Pasar la plancha por el cabello mojado puede causar daños severos, ya que el calor extremo puede hervir el agua dentro del tallo del cabello, provocando roturas y debilitamiento.

Finalmente, deslizar la plancha demasiado rápido por el cabello es otro error común. Para lograr un alisado efectivo y evitar la necesidad de pasar varias veces la plancha por la misma sección, es mejor mover la plancha lentamente y con movimientos suaves. Esto reduce el riesgo de quemaduras y garantiza un acabado más uniforme.

Cuidados posteriores después de usar las planchas de pelo

El uso diario de planchas para el cabello puede causar daños significativos si no se toman las precauciones adecuadas. Después de utilizar una plancha de pelo, es esencial seguir ciertos cuidados para mantener la salud y vitalidad de tu melena.

Acondicionamiento profundo

Aplicar un acondicionador profundo después de usar las planchas es crucial para reponer la humedad perdida y reparar el daño térmico. Opta por productos que contengan ingredientes hidratantes como aceites naturales o proteínas.

Protección térmica

Asegúrate de aplicar un spray protector térmico antes de usar la plancha. Esto crea una barrera entre el calor y tu cabello, minimizando el daño. Después de planchar, puedes usar sueros o aceites capilares para añadir un extra de brillo y protección.

Evitar el uso excesivo

Intenta no usar las planchas todos los días. Deja que tu cabello descanse al menos un par de días a la semana. Durante estos días, utiliza peinados naturales o trenzas para reducir la exposición al calor.

Corte regular

Un corte regular de puntas abiertas ayuda a mantener tu cabello sano y evita que el daño se extienda. Visita a tu estilista cada seis a ocho semanas para un corte de mantenimiento.

Recomendaciones para elegir las mejores planchas de pelo

Al momento de seleccionar una plancha de pelo, es crucial tener en cuenta varios factores que aseguren tanto la eficiencia en el alisado como la protección de tu cabello. Una de las principales características a considerar es el material de las placas. Las planchas con placas de cerámica, titanio o turmalina distribuyen el calor de manera uniforme y minimizan el daño por temperatura excesiva.

Tamaño y ajuste de temperatura

El tamaño de las placas varía y depende del tipo de cabello que tengas. Para cabello corto o flequillos, las placas más estrechas son ideales, mientras que las placas anchas son perfectas para cabello largo y grueso. Además, un ajuste de temperatura variable permite adaptar el calor según la textura de tu cabello, previniendo daños por sobrecalentamiento.

Tecnología y funciones adicionales

Invertir en una plancha equipada con tecnología iónica puede ser beneficioso, ya que reduce el frizz y aporta un acabado más suave y brillante. Otras funciones útiles a considerar incluyen el apagado automático por seguridad y el calentamiento rápido, para una mayor comodidad y eficiencia en el uso diario.